¿Qué es?
Los fibromas son el tumor sólido más común en la pelvis de una mujer, formado por los músculos de la pared uterina. La mayoría de estos tumores suelen ser benignos, con menos de 1 cáncer por cada 100.000 mujeres por año.
Se estima que el 70% de las mujeres desarrollarán fibromas en algún momento de su vida, especialmente después de los 50 años. Arthur Rossos Cuando salen de la pared uterina Tiempo completo Si son gordos o Submucosa Si están en el endometrio (la capa más interna del útero).
causa principal
Las hormonas femeninas como el estrógeno y la progesterona son responsables de la formación y el crecimiento de los fibromas uterinos. Los principales factores de riesgo son los afroamericanos, la obesidad, la diabetes, la hipertensión arterial (HA) y la terapia hormonal. Otras causas comunes incluyen la ausencia de trabajo de parto (ausencia de trabajo de parto) y menarquia, o el inicio prematuro de la menarquia.
Mioma: síntomas
Aunque el 25% de las mujeres en edad fértil cambia a los fibromas uterinos, la mayoría de ellas son asintomáticas. Cuando se presentan síntomas, el más común es el sangrado anormal, que se presenta en formas grandes y prolongadas, incluso sangrado entre períodos, que puede conducir a anemia por deficiencia de hierro. El dolor abdominal agudo o el dolor de espalda causado por el dolor y la necrosis durante la menstruación o las relaciones sexuales son otros síntomas comunes de los fibromas. Si son muy grandes, pueden causar síntomas relacionados con la compresión de órganos cercanos como la vejiga y el recto, y provocar micción frecuente, dificultad para vaciar la vejiga o estreñimiento.
Mioma: diagnóstico
Se necesita un examen pélvico para diagnosticar fibromas, especialmente si se observa un útero agrandado, ya que esta puede ser la razón principal. Existen pruebas especiales como la ecografía, la ecografía (vaginal y abdominal), o pruebas adicionales que nos permiten ver el tamaño, número, ubicación o vascularización de los fibromas. Otras pruebas de diagnóstico, como la histeroscopia, permiten la observación directa e incluso la extirpación de los miomas submucosos. Por otro lado, la tomografía computarizada y la resonancia magnética se utilizan en situaciones en las que el ultrasonido no puede mostrar suficientes datos. Los fibromas asintomáticos no requieren exámenes adicionales que no sean exámenes de rutina en mujeres. Cuando aparecen los síntomas, ellos y su tratamiento indican el intervalo de seguimiento y pruebas, que siempre lo establece el ginecólogo.
Mioma: tratamiento
El tratamiento de los fibromas depende de los síntomas, especialmente el sangrado. Antes de considerar la cirugía, debe elegir medicamentos para detener el sangrado, como: B. Antifibrinolíticos o preparaciones hormonales. Utilice los DIU como fármaco liberador de levonorgestrel o como AINE para aliviar el dolor. Sin embargo, a veces es necesario recurrir a la cirugía. En este caso, se utiliza una cirugía clásica llamada histerectomía, que incluye la extirpación transabdominal del útero mediante cirugía abierta, cirugía laparoscópica o cirugía vaginal. El ginecólogo elegirá el método de histerectomía más adecuado en función del análisis del caso particular. Si el fibroma está en la pared o afuera (generalmente más grande), se usa la resección del fibroma, que es adecuada para mujeres que aún no han cumplido el deseo de su madre. Si los miomas se localizan debajo de la mucosa, se pueden extirpar mediante histeroscopia, pero esto siempre depende de su tamaño, ubicación o de la cantidad de miomas presentes, lo que puede conducir a una reintervención. Actualmente existen otras alternativas a la cirugía convencional como la miólisis, la oclusión o embolización de la arteria uterina, la ablación endometrial o la terapia ecográfica focalizada guiada por MRT. Estos métodos requieren una evaluación especializada detallada, especialmente teniendo en cuenta los deseos genéticos del paciente.
Mioma: prevención
Donna Byrd, investigadora del Instituto Nacional de Salud Ambiental (NIEHS), y su personal de la Universidad George Washington y la Universidad Médica de Carolina del Sur llevaron a cabo un estudio de 1.036 mujeres de 35 a 49 años en Washington, DC. 1996 a 1999 Tomaron muestras de sangre de mujeres para analizar sus niveles de vitamina D. Los resultados muestran que las mujeres con altos niveles de vitamina D tienen un 32% menos de probabilidades de desarrollar fibromas uterinos que las mujeres sin vitamina D. Los estudios adecuados de vitamina D también muestran que las mujeres que pasan más de una hora al aire libre tienen un 4% menos de probabilidades de desarrollar fibromas uterinos% menor riesgo de desarrollar fibromas uterinos, esto se debe a que la producción de vitamina D aumenta cuando el cuerpo se expone al sol. Cita: Baird DD, Hill MC, Schectman JM, Hollis BW. 2013. La vitamina D y el riesgo de fibromas uterinos. Epidemiología; 24 (3): 447-453.
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